COMUNICADO DE PRENSA
San José, jueves 9 de febrero del 2023
Desde el Centro de Mujeres Afrocostarricenses, como organización pionera en la defensa y promoción de los derechos humanos de la población afrodescendiente, consideramos que no se puede asumir una posición contrahegemónica que no implique la actitud antirracista, dado que el racismo es una de las desigualdades sociales más profundas y persistentes en la historia de la humanidad.
La reciente denuncia realizada por la madre de una niña afrodescendiente de 5 años de edad, estudiante de la Escuela Manuel Hidalgo Mora de Aserrí, acerca de manifestaciones racistas y de discriminación racial vividas por su hija durante el acto cívico de inauguración del curso lectivo 2023; ponen de manifiesto que la niñez afrodescendiente de Costa Rica continua viviendo situaciones graves de racismo y discriminación que limitan el ejercicio pleno de sus derechos humanos e imposibilitan que los niños y niñas afrodescendientes vivan una vida libre de todo tipo de discriminación y tengan el acceso a las mismas oportunidades.
Es de suma urgencia, que el Estado costarricense continúe garantizando el derecho a la identidad de las niñas, niños y adolescentes afrodescendientes. Asimismo, se debe reconocer el aporte cultural que hemos dado a este país los pueblos y comunidades afrodescendientes y promover una cultura de paz y respeto que reconozca la diversidad étnica y cultura que caracteriza a nuestro país, a fin de que las personas afrodescendientes no seamos discriminadas y ejerzamos una vida libre de toda forma de discriminación.
Históricamente, las organizaciones afrodescendientes hemos acompañado diferentes procesos de denuncia y lucha contra situaciones de racismo y discriminación racial en el Sistema Educativo Costarricense. Del mismo modo, se han propuesto medidas que contribuyan a derribar los obstáculos que imposibilitan que los niños y niñas afrodescendientes gocen del derecho a su identidad y la educación sin discriminación.
Nos preocupa que a 13 años de los casos de racismo y discriminación racial que vivieron dos niñas afrodescendientes en la Escuela Manuel Hidalgo Mora de Aserrí (Caso «las niñas negras de Aserrí» el cual fue ampliamente difundido por los medios de comunicación), hoy puedan repetirse. En su momento con el apoyo del Ministerio de Educación Pública y el Centro de Mujeres Afrocostarricenses, la Escuela Manuel Hidalgo Mora de Aserrí implementó una estrategia de atención a situaciones de racismo y discriminación que involucró al personal administrativo, docente y niños y niñas de la escuela a fin de que las situaciones de racismo y discriminación que fueron cometidas en ese momento, no volviesen a repetirse y se garantizara el respeto a los derechos de todos los niños y niñas a vivir un espacio libre de toda forma de discriminación racial y en igualdad de oportunidades.
No obstante, es muy lamentable que este tipo de situaciones sigan presentándose en los centros educativos de Costa Rica y que a su vez sean situaciones de reincidencia. Debemos recordar que en el 2015, el Ministerio de Educación Pública emitió la circular DM-60-08-15 sobre “Revisión de Reglamentos Internos de los Centros Educativos”, en la cual expresamente se menciona que:
“… 1. Todas las instituciones educativas del país están llamadas a proteger la identidad étnica, lingüística, religiosa, sexual y cultural de nuestros estudiantes, creando las condiciones que faciliten la expresión de su identidad; a la vez, la eliminación de toda forma de discriminación”.
Del mismo modo, en el 2016, nuestro país aprobó la reforma constitucional del Articulo 1 de la Constitución Política, en la cual se reconoce que nuestro país es una República democrática, libre, independiente, multiétnica y pluricultural. Se trata de una reforma muy importante, porque implica una serie de responsabilidades al Estado costarricense, con el fin de generar las políticas públicas y acciones afirmativas necesarias que permitan mejorar la calidad de vida de nuestra población afrodescendiente.
Asimismo, el Ministerio de Educación Pública con el apoyo de la Dirección de Vida Estudiantil y el Departamento de Educación Intercultural del MEP, la Comisión Nacional de Estudios Afrocostarricenses (CONEA) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), elaboró en el 2019 el “Protocolo de Actuación en Situaciones de Discriminación Racial y Xenofobia” una herramienta orientada al personal docente y administrativo de los centros educativos del MEP que les permita atender situaciones de discriminación y potenciar el cumplimiento de los derechos de igualdad, libertad, dignidad y no discriminación, de toda la población estudiantil.
Como defensoras de Derechos Humanos, creemos que es el sistema educativo nacional, el espacio donde por excelencia, se debe educar a la población y, donde se debe de promover los derechos humanos, la no discriminación y el respeto a todas las personas sin distinción alguna de su grupo étnico – racial.
Instamos a las autoridades del Ministerio de Educación Pública, la Comisión Nacional de Estudios Afrocostarricenses del MEP; al Defensor Adjunto y la Defensoría de la Niñez de la Defensoría de las y los Habitantes, a cumplir con la normativa vigente nacional e internacional que protege los derechos de la niñez afrodescendientes, asimismo a cumplir con los compromisos internacionales que han sido asumidos por el Estado costarricense en el marco del Decenio Internacional para los Afrodescendientes y el Programa de Acción de la III Conferencia Mundial contra el Racismo, la Discriminación Racial, la Xenofobia y las Formas Conexas de Intolerancia; a fin de garantizar que nuestra niñez afrodescendiente cuente con las mismas oportunidades y el ejercicio pleno de sus derechos humanos.
